viernes, 9 de julio de 2010

Capítulo veinticinco

Subimos arriba y nos echamos unas fotos con el señor Ronald. Quién quiera que fuese este tal R.Mcdonal estaba triunfando esta noche.
 Cuando acabron las fotos decidí ir al baño, me estaba haciendo pis, ya no me podía aguantar más. Pero el payaso me abrazó y no me pude deshacer de él. Comenzaron de nuevo los flashed, creo que me echaron sobre unas cincuenta fotos y en todas salia abrazada de ese cansino payaso y claro está, con la sonrisa más falsa en la hisoria de la sonrisas.
 Al fin me soltó y Carlos me dijo que tenía que hablar conmigo y mientras caminabamos a un sitio más tranquilo yo rezaba por que no fuese otro que se iba a declarar. Sería horrible, ya me tendría que tirar por la ventana o algo.¿ Como me podían ver guapa con un esparadrapo en la frente y un trozo de tirita en la barbilla?, empezaba a cuestinar eso de que los chicos solo se fijan en ls delanteras y en el trasero. Yo no tenía mucho de esas dos cosas que digamos
-Vicky, voy a ser directo y tte lo voy a contar todo.
- A ver, sorprendeme...- me tapé la cara. No podía soporta más, ojalá que no sea lo que yo pienso solo digo eso.
-Que tu me has gustado desde siempre per al ver hoy a Eli he cambiado de opinión. Ella es tan lista, guapa y creo que si yo le gustase podríamos salir juntos.
Mientras hablaba, con cada palabra que decía me iba haciendo un poco más feliz y cuando acabó le solté un beso en la mejilla y un abrazo.
-No sabes la alegría que me has dado.- Carlos me miró aturdido.
-¿Por qué?.- Consiguió decir.
- No, por nada, es una larga historia. Bueno, ¿vamos a lo que me has dicho?
-Sí, ¿le puedes decir algo sobre mí?, dile si le gusto, hablale de mí y tu ya sabes.
- Haré lo que pueda, pero que sepas que antes la he visto tonteando con Guti. Yo le preguntaré primero si tiene algo con él. Si se han enroyado, van a salir o están saliendo, te alejas de ella ¿me estás escuchando? no vayas a hacerle daño o jamá te lo perdonaría.
-Vale. Tú tranquila, yo nunca le haría daño.
-Así me gusta, espero que eso sea verdad y lo mantegas siempre.

Subí a la fiesta y busqué a Eli. Seguía en la mesa con Guti me la llevé arrastrando de allí y nos encerramos en el baño.
- Cuentame todo hasta que te duela la boca de habar.
Eli parecía echizada y tenía la mirada perdida, me ignoraba.
-¡Eli!- Grité y luego la zarandeé, pero ni caso.
-Elizabeth Martínez, sal de tu encantamiento ahora mismo.- Le pellizqué en brazo.
-¡Ay!- ¿Quieres dejar de hacer eso?.- me recriminó.
-¿Que te pasa?
-Guti.- supiró embobada.
-¡Ag!, debí de haberlo imaginado. Guti, Guti y Guti, ¡maldito seas Gutierrez!.- Grité. Eli se sobresaltó
-Eeeh, deja de gritar de esa manera.
-No puedo, te ha dicho cuatro tonterías y mirate. Estas...¿atontada?, si , exactamente esa en la palabra. No puedes ser tan tonta Eli, despierta.- Di una palmada y se volvió a asustar.
-Llevas razón. Volvió la Eli de siempre.
-¿Estaís saliendo?.- Pregunté.
-¡Si!.- me cogió la cara.- Me cogió la cara.- Me ha pedido salir, ¡a mí, Vicky, a mí!
- Vaaaale.-dije rendida.-Parece que estás muy ilusionada, pero...no dejes que te rompa el corazón
-No te preocupes, he tenido una buena profesora, aunque no te lo creas se como hacer para que coma de mi mano.- Nos reímos y Eli abrió los brazos para darme un abrazo.
- Jamás te olvidaré.- Susurré para mí, pero ella tambien lo escuchó.
-Ni yo...-La abracé más fuerte. Se veía a leguas que no me podría olvidar de ella. Una amistad así nunca se olvida, en la vida. Y una niña como ella mucho menos.

No hay comentarios: